Un año. Es increíble lo rápido que puede pasar un año para una persona. Los días, los meses no son nada cuando vivimos sin preocupaciones, solo queremos que el tiempo pase y seguir adelante.
Pero cuando las personas que ya no están te retienen, ese año no pasa rápido. Los días pueden convertirse en un infierno que no termina y los recuerdos pueden ser tu peor enemigo.
Algo así hemos pasado este año los fans de Suicide Silence y en especial la familia y amigos de Mitch. Aún así, ellos más que nadie, nos han demostrado que no debemos dejar que el pasado nos atrape y nos impida continuar. Suicide Silence cuenta con otro vocalista y ya están preparando otro álbum.
La vida sigue y Mitch siempre estará con nosotros: en su hija y su mujer, en su música, sus letras, su forma única de cantar, en las emociones que nos transmite y lo mucho que nos ha ayudado cuando lo necesitábamos. Él sigue vivo a través de nosotros, en nuestros auriculares y corazones, porque Mitch Lucker es una leyenda y las leyendas nunca mueren.
